Ciclo de vida de la crisopa Nothochrysa fulviceps.

Nothochrysa fulviceps (Stephen, 1836) es una crisopa (Insecta: Neuroptera: Chrysopidae) originaria de Europa. Su cuerpo puede llegar a medir hasta 15 mm de largo y posee un patrón de coloración que la diferencia fácilmente de otras crisopas (1). Habita en los bosques de robles, arces o coníferas a varios metros de altura, por lo que es difícil de observar. En España se la ha visto mayoritariamente sobre Melojo (Quercus pyrenaica).

La hembra deposita varios huevos pedunculados sobre hojas o troncos (3), de allí eclosionan larvas que pasan por 3 estadios. Estas larvas son voraces depredadoras que utilizan sus mandíbulas en la captura y succión de presas (2), principalmente artrópodos pequeños como pulgones (las larvas de crisopa son conocidas por ser utilizadas como control biológico de plagas). Esta larva al igual que muchas otras larvas de crisopa, utiliza un curioso método de camuflaje, colocando distintos elementos del paisaje como restos de corteza, hojas o incluso restos de sus presas, lo que les da su nombre común “larva carga-basura” (4). Al cabo de unas semanas, forman un capullo de seda sobre hojas o troncos (5) dentro del cual se desarrolla una pupa y del que posteriormente emerge un adulto (6) de actividad nocturna y que se alimenta principalmente de polen, néctar y melaza.

Estas ilustraciones y composición fueron realizadas para participar en la 10a edición del premio de Ilustración Científica, otorgado por IllustraCiencia.

Año: 2023
Técnica: Ilustración digital.
Tipo de ilustración: Científica realista.
Tipo de proyecto/Cliente: Personal.